La famosa diva de Hollywood, Jamie Lee Curtis, ha ganado los corazones de los amantes del cine en todo el mundo con sus brillantes actuaciones en numerosos éxitos de taquilla a lo largo de las últimas cinco décadas. Junto a su innegable talento actoral, capturó la admiración de muchos con su figura impecable. A lo largo de su larga carrera, su característico corte de cabello corto se convirtió en una marca registrada que rara vez cambió. Sin embargo, la vida personal de Jamie Lee Curtis ha estado marcada por muchos altibajos, así como por historias controvertidas.
Adicción al Alcohol y Opiáceos
Durante muchos años, la famosa actriz luchó con la adicción a los analgésicos, de los cuales se volvió dependiente tras una cirugía estética fallida. Al reflexionar sobre este período, Curtis comentó que someterse a una cirugía estética para eliminar las bolsas bajo sus ojos fue una experiencia terrible. Tras el procedimiento, inicialmente comenzó a tomar opioides para aliviar el dolor, pero con el tiempo, se convirtieron en un hábito, y también empezó a consumir cantidades excesivas de alcohol.
“Estuve adicta dos veces: una por el dolor y la segunda por la vergüenza de ser adicta”, admitió la actriz en una ocasión, según medios extranjeros.
Una Tragedia Familiar Devastadora
La familia de Curtis también luchó con problemas de abuso de sustancias, incluido su padre, quien tenía antecedentes de consumo de drogas. Trágicamente, Jamie sufrió una pérdida profunda cuando su hermano falleció a la edad de 23 años debido a una sobredosis de heroína.
“Sabía que mi padre tenía problemas y yo tenía los míos. Compartíamos drogas. Hubo momentos en los que yo era la única hija que quería hablar con él. Tenía seis hermanos; ahora, tengo cinco. Mi hermano Nicholas murió de una sobredosis de heroína a solo 23 años”, reveló Curtis en una entrevista, según Nova.
Mientras luchaba con su propia adicción, Jamie escondía drogas de su hermano y hermana, quienes intentaban ayudarla a mantenerse en el camino correcto.
Una Llamada de Atención de Su Hija
A pesar de las dolorosas lecciones aprendidas tras la muerte de su hermano, la adicción de Curtis persistió. Sin embargo, años después, se dio cuenta de lo destructivo que se había vuelto su comportamiento, no solo para ella, sino también para su familia. Esta realización la llevó a buscar tratamiento para su adicción. Curtis compartió en una ocasión que un momento clave en su proceso de recuperación fue un comentario hecho por su hija, que entonces tenía ocho años, quien señaló que su madre nunca estaba allí para ella. Ese comentario se convirtió en un punto de inflexión para la actriz, llevándola de regreso a la realidad.