El Six Kings Slam de Riad concluyó de forma espectacular con un regalo excepcional para . A pesar de su derrota ante Novak Djokovic en el partido por el tercer puesto, el campeón español recibió una raqueta de oro macizo, valorada en casi 250.000 euros.
Este extravagante gesto subraya la importancia de Nadal como embajador del tenis en Arabia Saudí. El trofeo, que pesa aproximadamente 3 kg, simboliza no solo la legendaria carrera de Nadal, sino también las ambiciones del reino en el mundo del tenis.
El torneo, que ostentaba el mayor premio en metálico de la historia del tenis, estuvo a la altura de sus promesas. Con un cheque de 6 millones de dólares para el ganador, superó las recompensas de los Grand Slams y las Finales ATP. Incluso los jugadores eliminados en primera ronda se llevaron 1,5 millones de dólares, una suma que muchos jugadores no ganan en toda su carrera.
El evento captó la atención mundial y ofreció a los aficionados la oportunidad de presenciar el último enfrentamiento entre Nadal y Djokovic, así como la final entre los nuevos maestros del circuito, Sinner y Alcaraz. A pesar de las dudas sobre el entusiasmo local por el tenis, el éxito del Six Kings Slam presagia su regreso la próxima temporada, lo que confirma el surgimiento de Arabia Saudita como un nuevo bastión en el escenario mundial del tenis.